La clasificación de imágenes de satélite se usa para identificar y clasificar los diversos elementos que aparecen en las imágenes a partir de su firma espectral, por lo que se realizan habitualmente sobre imágenes multibanda. Durante el proceso se cada píxel de una imagen a una clase o categoría particular. La imagen resultante se compone de un mosaico de píxeles, cada uno de los cuales pertenece a una categoría, y puede considerarse un “mapa” temático de la imagen original .

Mapa temático resultante de una clasificación de imágenes de satélite

Cuando se habla de clases o categorías, se debe distinguir entre clases de información y clases espectrales.

Clases de información vs clases espectrales

El objetivo del proceso de clasificación es hacer coincidir las clases espectrales (imágenes) con las clases de información de interés (realidad). Cabe señalar que rara vez hay una simple coincidencia entre ambos tipos de clases, ya que pueden aparecer clases espectrales únicas que no necesariamente corresponden a ninguna categoría real o de interés para el analista. Alternativamente, una misma clase de información (por ejemplo, un bosque) puede contener una serie de subclases con variaciones espectrales únicas, que pueden deberse a variaciones en el porte de los árboles, en la densidad o en la especie, o incluso como resultado de sombras o variaciones en la iluminación de la escena. Es el trabajo del analista decidir sobre la utilidad de las diferentes clases espectrales y su correspondencia con las clases de información útil.

Clases de información vs clases espectrales

Aunque existe una cierta variedad de enfoques para la clasificación de imágenes de satélite, los dos más utilizados son la clasificación supervisada y la no supervisada.